La industria fintech en Chile ha vivido un crecimiento acelerado en los últimos años. Hoy existen más de 200 startups financieras activas, lo que convierte al país en uno de los ecosistemas más dinámicos de Latinoamérica. Estas empresas han impulsado la inclusión financiera, han abierto nuevas opciones de inversión y crédito, y han facilitado la vida de miles de usuarios que buscan soluciones rápidas, seguras y digitales.
Sin embargo, este desarrollo no está exento de desafíos. Con la masificación de los servicios financieros digitales, surge la necesidad de establecer un marco regulatorio sólido que garantice confianza, seguridad y transparencia. En este contexto, la Ley Fintech (N° 21.521), aprobada en 2023, marca un antes y un después para la industria en Chile.
Una de las áreas donde esta regulación tiene mayor impacto es en la validación de identidad digital, proceso clave para prevenir fraudes y garantizar que los servicios financieros sean accesibles pero también seguros.
En este artículo exploramos los principales retos y oportunidades que la nueva regulación presenta para las fintech en Chile, con foco en la validación de identidad.
La Ley Fintech regula a las empresas tecnológicas que ofrecen servicios financieros digitales, desde billeteras electrónicas hasta plataformas de inversión, crowdlending y pagos digitales. Sus objetivos principales son:
En otras palabras, la Ley Fintech busca un equilibrio entre innovación y seguridad, fomentando el crecimiento del ecosistema sin descuidar la protección al usuario.
La adopción de la Ley Fintech supone importantes desafíos para las startups financieras. Entre los más destacados se encuentran:
1. Onboarding con baja conversión
Muchas fintech en Chile todavía dependen únicamente de procesos de registro vía web. Estos suelen ser largos, poco intuitivos y generan fricción, lo que se traduce en usuarios que abandonan antes de completar el registro.
La ley impulsa la habilitación de múltiples canales digitales. Sin embargo, aún son pocas las fintech que han incorporado experiencias seguras de validación en WhatsApp, apps móviles o integraciones multicanal.
Un exceso de pasos en el proceso de validación puede transmitir seguridad, pero al mismo tiempo afectar la conversión. El reto está en mantener altos niveles de seguridad sin sacrificar la usabilidad.
Más allá de los retos, la nueva regulación genera un terreno fértil para la innovación y el crecimiento.
Las fintech que adopten biometría facial, verificación documental digital, autenticación multifactor y validación en segundos no solo cumplirán con la ley, sino que además podrán diferenciarse frente a la competencia.
Una validación sólida reduce el fraude digital, lo que se traduce en clientes más dispuestos a probar nuevos servicios financieros. En mercados como Chile, donde la confianza es un factor decisivo, este aspecto es clave para el crecimiento.
Al cumplir con la Ley Fintech chilena, las startups se preparan para expandirse a países como México, Colombia o Perú, que avanzan en regulaciones similares. Esto facilita la escalabilidad de modelos de negocio a nivel latinoamericano.
Esto demuestra que Chile no está aislado: se trata de una tendencia regional, y quienes se adapten rápido tendrán más facilidad para crecer en toda Latam.
La industria fintech en Chile ha vivido un crecimiento acelerado en los últimos años. Hoy existen más de 200 startups financieras activas, lo que convierte al país en uno de los ecosistemas más dinámicos de Latinoamérica. Estas empresas han impulsado la inclusión financiera, han abierto nuevas opciones de inversión y crédito, y han facilitado la vida de miles de usuarios que buscan soluciones rápidas, seguras y digitales.
Sin embargo, este desarrollo no está exento de desafíos. Con la masificación de los servicios financieros digitales, surge la necesidad de establecer un marco regulatorio sólido que garantice confianza, seguridad y transparencia. En este contexto, la Ley Fintech (N° 21.521), aprobada en 2023, marca un antes y un después para la industria en Chile.
Una de las áreas donde esta regulación tiene mayor impacto es en la validación de identidad digital, proceso clave para prevenir fraudes y garantizar que los servicios financieros sean accesibles pero también seguros.
En este artículo exploramos los principales retos y oportunidades que la nueva regulación presenta para las fintech en Chile, con foco en la validación de identidad.
La Ley Fintech regula a las empresas tecnológicas que ofrecen servicios financieros digitales, desde billeteras electrónicas hasta plataformas de inversión, crowdlending y pagos digitales. Sus objetivos principales son:
En otras palabras, la Ley Fintech busca un equilibrio entre innovación y seguridad, fomentando el crecimiento del ecosistema sin descuidar la protección al usuario.
La adopción de la Ley Fintech supone importantes desafíos para las startups financieras. Entre los más destacados se encuentran:
Muchas fintech en Chile todavía dependen únicamente de procesos de registro vía web. Estos suelen ser largos, poco intuitivos y generan fricción, lo que se traduce en usuarios que abandonan antes de completar el registro.
La ley impulsa la habilitación de múltiples canales digitales. Sin embargo, aún son pocas las fintech que han incorporado experiencias seguras de validación en WhatsApp, apps móviles o integraciones multicanal.
Un exceso de pasos en el proceso de validación puede transmitir seguridad, pero al mismo tiempo afectar la conversión. El reto está en mantener altos niveles de seguridad sin sacrificar la usabilidad.
Más allá de los retos, la nueva regulación genera un terreno fértil para la innovación y el crecimiento.
Las fintech que adopten biometría facial, verificación documental digital, autenticación multifactor y validación en segundos no solo cumplirán con la ley, sino que además podrán diferenciarse frente a la competencia.
Una validación sólida reduce el fraude digital, lo que se traduce en clientes más dispuestos a probar nuevos servicios financieros. En mercados como Chile, donde la confianza es un factor decisivo, este aspecto es clave para el crecimiento.
Al cumplir con la Ley Fintech chilena, las startups se preparan para expandirse a países como México, Colombia o Perú, que avanzan en regulaciones similares. Esto facilita la escalabilidad de modelos de negocio a nivel latinoamericano.
Esto demuestra que Chile no está aislado: se trata de una tendencia regional, y quienes se adapten rápido tendrán más facilidad para crecer en toda Latam.
La regulación fintech en Chile no debe verse como un obstáculo, sino como una oportunidad estratégica. Las startups que adopten soluciones de validación de identidad rápidas, seguras y omnicanales estarán mejor preparadas para:
En un sector tan competitivo, la validación de identidad no es un simple requisito legal: es una ventaja competitiva que puede definir el éxito de una fintech en los próximos años.
En un sector tan competitivo, la validación de identidad no es un simple requisito legal: es una ventaja competitiva que puede definir el éxito de una fintech en los próximos años.