Las fintech en Chile enfrentan el desafío de mejorar la conversión en sus procesos KYC en un entorno cada vez más regulado y competitivo. La apuesta por una validación de identidad omnicanal, segura y sin fricciones es la clave para escalar en el mercado, ganar confianza de los usuarios y cumplir con la Ley Fintech.El sector fintech en Chile atraviesa un momento de expansión acelerada. Según FinteChile, el ecosistema local ya cuenta con más de 200 startups activas, lo que convierte al país en un polo clave de innovación en Latinoamérica. Estas empresas están revolucionando la manera en que los usuarios acceden a servicios financieros ágiles y digitales, pero enfrentan un reto común: lograr que los procesos de KYC (Know Your Customer, o validación de identidad) sean seguros, rápidos y con altas tasas de conversión.
La realidad es que muchas fintech dependen todavía de un único canal —el onboarding vía web—, lo que genera fricción, abandono y pérdida de clientes potenciales. Frente a un usuario digital cada vez más exigente, la clave está en evolucionar hacia modelos de validación omnicanal que combinen seguridad con una experiencia fluida.
En este artículo exploraremos los principales desafíos de los procesos KYC en Chile, y las estrategias más efectivas para mejorar la conversión sin comprometer la seguridad.
¿Por qué el canal web no es suficiente para la validación de identidad?
El canal web ha sido históricamente la vía más utilizada para procesos de registro en fintech. Sin embargo, en el mercado chileno presenta limitaciones claras:
Los formularios extensos, la carga manual de documentos y las verificaciones poco intuitivas generan frustración. Muchos clientes abandonan antes de terminar el registro, lo que impacta directamente en la tasa de adquisición.
En Chile, la penetración de canales alternativos como WhatsApp supera el 90%. Este nivel de uso demuestra que los usuarios prefieren plataformas familiares e intuitivas frente a formularios web tradicionales.
Estudios del ecosistema fintech muestran que los procesos de onboarding en canales móviles logran una tasa de finalización hasta 30% mayor que en los procesos únicamente web. La movilidad, la facilidad de uso y la rapidez son factores decisivos.
La solución no está en eliminar el canal web, sino en ofrecer al usuario múltiples alternativas para validar su identidad, adaptándose a sus hábitos digitales.
Con más del 90% de penetración en Chile, WhatsApp se ha convertido en el canal de comunicación más confiable. Implementar validación de identidad en esta plataforma incrementa significativamente la probabilidad de que el usuario complete el proceso, gracias a su familiaridad y alta tasa de apertura.
Las apps ofrecen la posibilidad de integrar biometría (huella, rostro), autenticación en dos pasos y verificaciones más seguras, reduciendo los riesgos de fraude y acelerando la experiencia.
La omnicanalidad no significa sustituir, sino integrar. Permitir que un usuario inicie el registro en la web y lo continúe en WhatsApp o en una app móvil reduce la fricción y mejora la conversión.
Chile tiene la oportunidad de aplicar estas experiencias regionales para optimizar sus procesos y acelerar su crecimiento en el sector.
La regulación no debe verse como una barrera, sino como un impulsor de innovación. Aquellas empresas que adopten estas prácticas no solo optimizarán su conversión, sino que estarán listas para expandirse en toda Latinoamérica.