En este artículo encontrarás:
El fraude en telecomunicaciones va en aumento y México no es la excepción.
Bypass, SIM swapping y smishing generan pérdidas millonarias cada año. Hoy te explico el alcance real del problema con datos, casos y soluciones concretas.
El fraude en la industria de las telecomunicaciones es cada vez más común y a medida que aumentan los usuarios y las operaciones digitales es más importante saber quién es tu cliente.
En México, el crecimiento acelerado de usuarios móviles e internet ha venido acompañado de un alza en intentos de fraude y generando pérdidas millonarias para los operadores.
- Un estudio de subex.com estimó que fraudes de interconexión como el bypass le cuestan a la industria global varios miles de millones de dólares al año
- Las autoridades mexicanas también reportan un incremento sostenido en casos de suplantación de identidad telefónica: la Guardia Nacional registró 731 denuncias en 2020, subiendo a 1,078 en 2023.
Este panorama obliga al sector a reforzar medidas de seguridad y prevención. Es sobre eso que hablaré hoy, en este post verás:
- Tipos comunes de fraude en telecomunicaciones
- Impacto y casos recientes
- Prevención y soluciones
- Colaboración y marco regulatorio
- Seguridad que se nota, confianza que se construye
Tipos comunes de fraude en telecomunicaciones
Veamos ahora las diferentes modalidades de fraude que se han identificado en el contexto mexicano.
IRSF (International Revenue Share Fraud)
En español significa Fraude Internacional de Ingresos Compartidos. Consiste en explotar líneas telefónicas de tarifa especial o premium para generar llamadas de alto costo a cargo de una víctima (por ejemplo, una empresa) y así compartir los ingresos por esas llamadas.
En esta estafa, los delincuentes hacen que la compañía víctima pague tarifas internacionales elevadas a números controlados por los estafadores. Se estima que este esquema puede generar hasta 1 dólar por minuto de llamada, de los cuales el defraudador obtiene una parte significativa.
Fraude de interconexión (bypass)
Modalidad donde se evitan las rutas de interconexión oficiales para cursar tráfico telefónico, aprovechando diferencias de tarifas entre redes. Los estafadores utilizan técnicas como SIM boxes (dispositivos con decenas de SIM) para enrutar llamadas internacionales por redes locales, eludiendo cargos de terminación.
Esto causa pérdidas de ingresos a los operadores y congestiona las redes. El fraude de bypass ha creado un entorno propicio para esquemas ilícitos cuando existen grandes brechas entre tarifas internacionales y locales.
Además, la falta de controles de identificación rigurosos facilita que líneas fraudulentas se activen sin detección.
SIM Swapping
También llamado duplicación o intercambio de SIM, es un fraude donde el atacante se hace pasar por el propietario legítimo de una línea móvil para obtener un duplicado de su tarjeta SIM.
Una vez con la SIM clonada, puede tomar control del número telefónico y recibir mensajes o llamadas del usuario, incluyendo códigos de verificación bancarios.
De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Ciudadana de CDMX, el SIM swapping busca suplantar la identidad del usuario para acceder a sus cuentas bancarias vinculadas al número de teléfono.
En México ha habido un aumento en estos casos; por ejemplo, el regulador IFT reportó cientos de incidentes anuales en estados como Oaxaca, Morelos y Ciudad de México, con tendencias al alza año con año.
Fraude en contratación de planes postpago
Una modalidad cada vez más común en México es la contratación de planes postpago mediante el uso de identidades falsas o sintéticas. Los delincuentes logran romper los filtros de validación de las operadoras y acceden a servicios, equipos móviles o líneas sin intención de pagar por ellos.
Esto expone a las Telcos a pérdidas significativas: productos que no se recuperan, líneas que generan facturación impaga y una cartera de clientes morosos difícil de gestionar. Además, este tipo de fraude puede escalar si no se detecta a tiempo, afectando también la reputación de las compañías ante clientes reales.
La utilización de datos robados o parcialmente verdaderos para crear perfiles sintéticos representa un reto importante para los sistemas de verificación actuales. Por eso, fortalecer los controles de identidad desde el inicio del proceso de contratación es clave para prevenir este tipo de fraude y proteger los ingresos.
Suplantación de identidad
En general, muchos fraudes telco se apoyan en robo o falsificación de identidad. Esto incluye casos donde delincuentes usan documentos falsos o datos personales robados para contratar servicios a nombre de otras personas, obtener equipos (ej. celulares) financiados, o hackear sistemas de voz (como con el acceso a PBX corporativos).
Por ejemplo, el fraude de suscripción ocurre cuando se firman contratos con identidades y tarjetas de crédito robadas, obteniendo dispositivos o líneas que luego no se pagan.
La suplantación también potencia otros fraudes: es el paso previo necesario para el SIM swapping y para muchas estafas en línea, por lo que proteger la identidad digital de los usuarios es crucial.
Impacto y casos recientes
Estas modalidades de fraude tienen consecuencias graves. Para las empresas de telecomunicaciones, significan pérdida directa de ingresos (minutos no cobrados, equipos no pagados), sanciones regulatorias si no los contienen y costos operativos en investigación.
Tradicionalmente, las grandes telefónicas asumían estos costos de fraude como parte del negocio, pero el incremento exponencial de casos los ha vuelto insostenibles.
Globalmente, se reportan pérdidas anuales superiores a $28 mil millones de dólares por fraudes en telecomunicaciones y México no es la excepción en sufrir este embate.
Además del aspecto económico, el fraude deteriora la experiencia del cliente (líneas suspendidas erróneamente, bloqueos preventivos) y mina la confianza en servicios como la banca móvil vinculada al número telefónico.
En años recientes, se han documentado en México numerosas estafas vía telefónica y SMS, desde llamadas internacionales fantasma para incitar a devolver la llamada a un número de tarifa especial (wangiri), hasta redes delictivas de SIM swapping que fueron desarticuladas después de robar millones de pesos de cuentas bancarias ligadas a teléfonos.
En marzo de 2025, un estudio del IFT destaca que la incidencia de SIM swapping es alta en México y crece debido a deficiencias en medidas de seguridad tanto de las operadoras móviles como del marco nacional, comparado con países como EUA, Alemania o Reino Unido que cuentan con reguladores activos contra este fraude.
Prevención y soluciones
Para combatir el fraude en telecomunicaciones, se requiere una estrategia integral que involucre tecnología, procesos y regulación:
Verificación robusta de identidad
Implementar mecanismos de KYC (Know Your Customer) al alta de servicios y en cambios sensibles (p. ej. reposición de SIM). Las operadoras en México han comenzado a exigir la presentación de identificación oficial (INE) y validación biométrica al tramitar un duplicado de SIM.
Este control reduce drásticamente el SIM swapping, pues dificulta que un estafador se haga pasar por el cliente.
Asimismo, verificar identidades de quienes envían grandes volúmenes de SMS (empresas) ayuda a filtrar a actores maliciosos; las telcos que han incorporado soluciones para ese fin redujeron en gran cantidad el smishing.
En este rubro, Truora ofrece herramientas de verificación digital (documento, rostro, antecedentes) que pueden integrarse fácilmente a los procesos del operador para garantizar que cada alta y transacción sea realizada por usuarios legítimos.
Monitoreo y análisis de comportamiento
Emplear sistemas avanzados de detección de fraude en tiempo real. Las compañías deben monitorear patrones inusuales de llamadas y mensajes en sus redes. Por ejemplo, detectar picos de llamadas internacionales fuera de horario típico podría señalar un fraude IRSF en curso.
Actualmente existen plataformas con inteligencia artificial y machine learning capaces de identificar y aislar tráfico sospechoso en minutos, mucho más rápido que los análisis manuales.
Estas herramientas permiten frenar llamadas fraudulentas antes de que escalen, minimizando el impacto. Es importante calibrar bien estos sistemas para evitar falsos positivos que afecten a clientes legítimos, manteniendo un balance entre seguridad y servicio.
Mecanismos de autenticación adicionales
Fomentar el uso de autenticación de dos factores (2FA) en servicios vinculados al teléfono.
Si bien no evita el fraude telefónico en sí, sí protege las cuentas de los usuarios (bancarias, de redes sociales, etc.) aun si su número fue comprometido. Autoridades y expertos recomiendan habilitar 2FA en aplicaciones móviles y cuentas críticas.
De esta forma, aunque un delincuente logre clonar una SIM, necesitará una segunda verificación (como una huella digital o token) para acceder a información sensible.
Colaboración y marco regulatorio
Es esencial la coordinación entre operadores, reguladores (como el IFT) y autoridades de seguridad (Guardia Nacional, Fiscalía) para intercambiar información sobre nuevas amenazas y casos.
El marco legal mexicano está avanzando, falsificar tarjetas SIM o datos para obtenerlas es un delito, y se han evaluado iniciativas como registros nacionales de telefonía móvil con datos biométricos para disuadir a los delincuentes.
Por ejemplo, la Ley Federal de Telecomunicaciones se reformó para permitir la creación del PANAUT (Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil), que buscaba recopilar datos biométricos de los titulares de líneas; aunque su implementación está suspendida por retos a la privacidad, muestra la intención del Estado de reforzar el control sobre la asignación de líneas móviles.
A nivel internacional, países como España han obligado a prepagos a registrarse con identificación oficial, reduciendo fraudes anónimos. México podría evaluar medidas similares acompañadas de salvaguardas de protección de datos.
Seguridad que se nota, confianza que se construye
El fraude en telecomunicaciones exige decisiones firmes. Las empresas que actúan con visión, integrando verificación de identidad, monitoreo en tiempo real y autenticación robusta, fortalecen su reputación y protegen sus ingresos con eficiencia.
Truora ofrece soluciones listas para implementar, pensadas para telcos que quieren mantenerse un paso adelante sin comprometer la experiencia del usuario. Validación digital, detección inteligente de fraude y procesos sin fricción: eso es lo que marca la diferencia.
Invertir en prevención es avanzar con solidez. Es mostrarle al mercado que la seguridad se planifica.
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